Mi lector perfecto




Imaginaría alguien que al tomar una de mis obras se fuera con la sensación de haber adquirido algo que desde hace mucho desea. Que tenga entre sus manos esa obra que desde tiempo no ha encontrado, que le haga pensar, soñar… pero sobre todo, disfrutar. Que cuando cierre la última página se duerma deseando soñar con vivir la trama, con luchar como lucha el personaje central o que simplemente logre verse reflejado en cualquiera de los personajes, aunque sea el malo malísimo.

En fin, que compare mi trabajo con otros y que al final diga ¡Me ha gustado!

Por: Manuel Dario