![]() El vagón de las mujeres Autor: Anita Nair Santillana Ediciones Generales El avance de las comunicaciones ha abierto una
ventana desde la cual los occidentales hemos podido husmear a ese otro mundo
que duerme mientras nosotros estamos despiertos. Gracias a la inmigración se
nos han llenado los ojos de lágrimas al probar el picante de la comida hindú, o
sentido en el paladar el crujido de insectos deliciosamente tostados, o hemos
pasado noches en vela intentando profundizar en las religiones orientales. ¿Quien
se resiste a la majestuosidad de las mujeres africanas, al colorido de los
Saris usados por las indias, a los complicados recovecos de un cabello peinado
a la japonesa? La comida, el vestido, la religión, las costumbres que llamamos
exóticas nos llevan a tomar una posición: nos gustan o no. Estamos de acuerdo o
no. Los admiramos o los detestamos. Pero nunca nos son indiferentes porque
detrás de todo eso descubrimos a seres humanos que igualmente buscan su razón
de ser, en eso somos iguales y no hay color de piel que sea ajeno a ello. Y de ellos precisamente nos habla Anita Nair
en su libro el vagón de las mujeres. En él, la autora nos hace viajar en un
tren que atraviesa la India, nos mete en un compartiendo en el que viajan seis
mujeres durante toda una noche, ocasión que ellas aprovechan para hablar
libremente de sí mismas buscando un objetivo único: Ser escuchadas. Cada una
deshilacha su mundo, su familia, su hogar, su dependencia de un entorno regido
por los hombres, ya sean esposos o familiares, sus deseos y esperanzas; en
últimas la búsqueda de su propia razón de ser. Y en esa búsqueda andamos todos los seres
humanos, hombres y mujeres, no importa que luzcamos un sari o un kimono o un
jean y una camiseta, lo externo pierde relevancia, se deja de pertenecer a una
raza, a unas costumbres, para ubicarse en un plano más universal: el de ser
humano, el de hallar la propia voz que sale de las entrañas y que pueda llegar
a reconocerse como propia. Por: Ágata |
15 de Septiembre, 2007, 12:02:
ÁgataUn libro para ti